De nombre « Extraño » fue el toro que hizo tercero; pronto en las embestidas y noble y bravo en el recorrido. Lea Vicens mostró gran dominio del temple con su cabalgadura, ya que el animal tuvo una enorme acometividad, pero siempre fue superado por la elegante rejoneadora francesa.
La faena en ambos toros fue completa en todos los tercios con gran aclamación del público. Pero a la hora de la verdad, y a pesar de que no hubo ningún mitin con los aceros, los animales mostraron una clara resistencia a la muerte, y esa tardanza enfrió los ánimos del graderío, que acudió al coso cubierto en un cuarto de plaza en tarde sofocante.
Vicens dio una vuelta al ruedo con el tercero tras una fuerte petición de oreja que el palco no atendió. Sonó un aviso. Al noble y bravo animal se le dio la vuelta al ruedo.
El día de Valladolid
Una tarde en la que Lea Vicens cuajó una buena faena al tercero, pero la tardanza del toro en echarse evitó un más que posible premio.
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